El
pasado viernes 3 de mayo, el grupo ha hecho el paseíllo por segundo año
consecutivo, en la plaza de toros del poblado de Cruz de Mangas, municipio de
Tezontepec de Aldama, donde en esta ocasión han alternado por primera vez con
sus colegas los forcados hidalguenses.
Ante
una aceptable entrada y en tarde aunque soleada fue un poco ventosa, se
lidiaron dos toros con edad, y dos novillos, de la vacada mexiquense Los
Martínez, de los que destacaron dos de ellos, que tuvieron contenido y nobleza.
Diana
Hernández ha ido a la cara a un burel con 320 kilos que en el primer intento
embistió calamocheando por lo que tuvo que irle a un segundo intento, en el que
la res le aventó la cara arriba, teniendo que irle, que lo hizo con una
importante determinación y valor así como todo el grupo, a un tercero, en el
que finalmente se consumó la pega, cabiendo mencionar el apoyo de algunos
elementos del grupo de los hidalguenses, haciéndose ovacionar con fuerza.
Al
final dieron la vuelta al ruedo con el rejoneador Diego Cruz, que tuvo pasajes
importantes, con banderillas de frente y galopes a dos pistas, causando una
grata impresión por el buen concepto que mostró, a más de que la res colaboró
mucho.
Antes,
abrió plaza Leonardo Zatarain que también repetía por tercer año en dicho
escenario, enfrentando a un astado que por momentos se ponía por delante con el
que ha tenido momentos destacables y al que pegaron los forcados hidalguenses
al segundo intento.
A
pie, el matador Luis Conrado enfrentó un novillo de buen estilo, obediente y
con fijeza que además tuvo duración y al que le pegó muletazos que tuvieron
importancia y buen gusto.
Cerró plaza el aspirante a novillero Víctor
Guevara, que pese a su verdor, estuvo solvente, primero toreando con el percal
y luego con la muleta, a un novillo que aunque tuvo calidad le faltó un poco
más de fortaleza. Lo mató pronto y cortó la única oreja de la tarde.