El pasado sábado 15 de junio, el grupo de forcados femenil de Hidalgo celebró su segundo aniversario con un festival taurino de rejoneadores, que finalmente fue interesante y con matices del que seguramente, aunque fue poca gente, ésta salió contenta de la plaza monumental Vicente Segura, de la capital hidalguense.
Se dieron las condiciones climáticas además
propicias, con una tarde soleada y de buena temperatura dado que durante la
semana había estado lloviendo de manera inmisericorde.
Se lidiaron ejemplares de la vacada
hidalguense de don Servando Paredes, con cara y que, más-menos, han permitido
el lucimiento de los actuantes.
Abrieron plaza actuando por colleras, los
rejoneadores hidalguenses, el maestro Miguel Ángel Vila, junto con Julián
Viveros, enfrentando una vaca con presencia y que aunque metió bien la cara en
los capotes de los auxiliares de los caballeros, sin embargo cortaba su viaje
al caballo y que además por momentos buscaba el refugio de las tablas, por lo
que la labor de los caballeros tuvo mérito y reconocida por la asistencia, pero
que desafortunadamente no pudieron rubricar bien al fallar con el rejón mortal.
Vila se esmeró y por momentos se fue de frente en los medios con los
palitroques. Bien Viveros con las farpas de castigo y una corta.
Aquí actuaron las valientes hidalguenses que
hicieron una buena pega al primer intento, con Claudia Zamudio a la cara que
brindó de manera emotiva a la forcado lesionada Diana Hernández, que fue
intervenida el pasado jueves de la fractura que sufrió durante un entrenamiento, rematando con un rabilleo a cargo de Paola Trejo.
También actuaron sus homologas de Querétaro, con Edina Erthal a la cara, así
como los forcados hidalguenses y amadores de Puebla, que tuvieron una aseada
participación, saliendo al tercio a agradecer los aplausos del respetable al
finalizar la lidia.
En segundo lugar salió un ejemplar con poca
fuerza y que correspondió a Leonardo Zatarain y Julián Viveros. Ambos
estuvieron aseados, haciendo bien las cosas Zatarain, quien destacó en un par a
dos manos y la rosa, de frente. Entre ambos, se fueron de frente con banderillas
al estribo que les fueron muy aplaudidas. Leonardo dejó un rejonazo contrario
con el que tardó en doblar la res, quedando ahí el reconocimiento.
El grupo femenil de Hidalgo, con Paola Trejo
a la cara, hizo una bonita y emotiva pega, así como también el grupo de
forcadas de Querétaro, con Karla Amarillas por delante, siendo muy aplaudidas.
El tercer ejemplar lo lidió Diego Cruz,
débil pero que ha sido el mejor, con mucha calidad, fijeza, bravura y voluntad
para embestir, con el que ha tenido buenos pasajes, con banderillas de frente y
galopes a dos pistas que entusiasmaron, así como a la hora de dejar tres
banderillas cortas.
Aquí actuaron los amadores de Hidalgo, con
Juan de Dios Corona a la cara, que hizo una pega aseada, para después salir el
grupo femenil de Hidalgo, luciendo en la cara Itzel Baltazar.
El ejemplar que cerró plaza tuvo motor pero
en cambio fue muy complicado, con sentido y falta de clase en su embestida.
Sufrió una caída Diego Cruz sin pasar a mayores durante la lidia, saliendo a
clavar un par de banderillas Leonardo Zatarain, que lo hizo con aseo, una de
ellas al violín, pese a que la vaca acortaba su viaje y recorrido. Diego se
repuso pese a que también al momento de cambiar de caballo en el patio de
cuadrillas sufrió otra caída, por el temperamento de la jaca.
Reapareció Dafne Romero, cabo del grupo
femenil de Hidalgo, luego de su percance de ligamentos de la rodilla hace un
par de meses, pegando este ejemplar, áspero y que le echó la cara arriba en el
encuentro en los dos intentos a los que le fue, resultando emotiva su
intervención, rematando con un buen rabilleo Dante Austria.
Cruz tuvo que descabellar y quedó su labor
en aplausos, saludando tanto forcadas como forcados al despedirse, llevándose
una ovación cálida.
Cabe decir que también le pegaron algunos
muletazos a las reses, los aspirantes a novillero Pablo Vite, Víctor Hugo
Gallardo y Carlos Pereda, los novilleros Iván Vela y Luis Oropeza “El Poeta”,
quien se llevó este último una cortada que requirió de cuatro puntos de sutura
en la mano izquierda, causada por un rejón de banderilla, y el matador Pablo
Samperio.
Al final también hubo una entrega de
reconocimientos a los participantes, contándose con la presencia del doctor Álvaro Tejeida, que ha intervenido ya a un buen número de forcados apoyando siempre a la causa
